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Mi Regreso al Tibet: Capitulo 48.- La Confesión Negativa I (Papiro NU)

LA CONFESIÓN NEGATIVA I. (Papiro NU)

Vamos ahora a hablar desde el fondo profundo de todas las edades. ¡Escuchadme hombres y dioses!

La confesión negativa del Papiro NU es para los hombres que hayan logrado la muerte radical, absoluta. Después de la aniquilación definitiva del EGO y de los tres traidores de Hiram Abiff, bien podemos darnos el lujo de penetrar vestidos con los cuerpos gloriosos de KAM-UR en la doble sala de la VERDAD-JUSTICIA.

Inútil seria intentar entrar victoriosos en la doble sala de MAAT sin haber pasado antes por la suprema muerte... (No nos estamos refiriendo a la muerte del cuerpo físico.) Sólo los difuntos auténticos tienen derecho a la confesión negativa; sólo ellos pueden realmente someterse a la confesión terrible del papiro NU de los misterios egipcios. Entiéndase por difuntos auténticos aquellos que murieron dentro de sí mismos en las cuarenta y nueve regiones del subconsciente.

Cualquier verdadero difunto vestido con los cuerpos solares, puede presentarse en la doble sala de MAAT para hacer su confesión negativa.

CONFESIÓN NEGATIVA

"Salve, Dios grande, señor de la Verdad y de la Justicia, Amo poderoso: Heme aquí llegado ante ti". "¡Déjame, pues contemplar tu radiante hermosura! Conozco tu nombre mágico y los de las cuarenta y dos divinidades que te rodean en la vasta sala de la Verdad-Justicia, el día que se hace la cuenta de los pecados ante Osiris; la sangre de los pecadores les sirve de alimento".

"Tu nombre es: "EL SEÑOR DEL ORDEN DEL UNIVERSO" cuyos ojos son las dos diosas hermanas. "He aquí que yo traigo en mi corazón la VERDAD y la JUSTICIA, pues he arrancado de él todo el mal". "No he causado sufrimiento a los hombres. No he empleado la violencia, con mis parientes". "No he sustituido la injusticia a la justicia. No he frecuentado a los malos. No he cometido crímenes".

"No he hecho trabajar en mi provecho con exceso. No he intrigado por ambición. No he maltratado a mis servidores. No he blasfemado de los dioses". "No he privado al indigente de su subsistencia".

"No he cometido actos execrados por los dioses. No he permitido que un servidor fuese maltratado por su amo". "No he hecho sufrir a otro. No he provocado el hambre. No he hecho llorar a los hombres mis semejantes". "No he matado ni ordenado matar. No he provocado enfermedades entre los hombres". "No he sustraído las ofrendas de los templos. No he robado los panes de los dioses". No me he apoderado de las ofrendas destinadas a los espíritus santificados. No he cometido acciones vergonzosas en el recinto sacro-santo de los templos". "No he disminuido la porción de las ofrendas. No he tratado de aumentar mis dominios empleando medios ilícitos, ni de usurpar los campos de otro".

"No he manipulado los pesos de la balanza ni su astil. No he quitado la leche de la boca del niño. No me he apoderado del ganado en los prados". "No he cogido con lazo las aves destinadas a los dioses. No he pescado peces con cadáveres de peces". "No he obstruido las aguas cuando debían correr". "No he deshecho las presas puestas al paso de las aguas corrientes. No he apagado la llama de un fuego que debía arder".

"No he violado las reglas de las ofrendas de carne. No me he apoderado del ganado perteneciente a los templos de los dioses". "No he impedido a un dios el manifestarse: ¡ Soy puro, soy puro, soy puro!".

"He sido purificado como lo ha sido el gran Fénix de Herakleópolis". "Pues yo soy el Señor de la respiración que da vida a todos los iniciados el día solemne en que el Ojo de Horus, en presencia del Señor divino de esta tierra culmina en Heliópolis", "Puesto que he visto culminar en Heliópolis el Ojo de Horus, pueda no sucederme ningún mal en esta región, ¡oh dioses! ni en vuestra sala de la Verdad-Justicia. Pues yo conozco el nombre de esos dioses que rodean a MAAT, la gran divinidad de la Verdad-Justicia".

Hasta aquí la confesión negativa del papiro mencionado en nuestro futuro «MENSAJE DE NAVIDAD 1970-1971» continuaremos con el papiro II (Nebsenti)