LA MATERNIDAD
La vida del ser humano comienza como una simple célula sujeta, como es natural, al tiempo extraordinariamente rápido de las células vivientes.
Concepción, gestación, nacimiento, es siempre el trío maravilloso y formidable con que comienza la vida de cualquier criatura.
Es realmente sorprendente saber que nuestros primeros momentos de existencia debemos vivirlos en lo infinitamente pequeño, convertidos, cada uno de nosotros en una simple célula microscópica.
Comenzamos a existir en forma de insignificante célula y terminamos la vida viejos, ancianos y sobrecargados de recuerdos.
El YO es memoria. Muchos ancianos ni remotamente viven en el presente, muchos viejos viven únicamente recordando el pasado. Todo viejo no es más que una voz y una sombra. Todo anciano es un fantasma del pasado, memoria acumulada y ésta es la que continúa en los Genes de nuestros descendientes.
La concepción humana se inicia con tiempos extraordinariamente veloces, pero a través de los distintos procesos de la vida se van haciendo cada vez más y más lentos.
A muchos lectores les conviene recordar la relatividad del tiempo. El insignificante insecto que sólo vive unas cuantas horas en una tarde de verano, parece como si casi no viviera, más vive realmente todo lo que un hombre vive en ochenta años, lo que sucede es que vive rápidamente, un hombre vive en ochenta años todo lo que vive un planeta en millones de años.
Cuando el Zoospermo se junta con el huevo comienza la gestación. La célula con la cual comienza la vida humana, contiene cuarenta y ocho cromosomas.
Los cromosomas se dividen en genes, un centenar de éstos últimos o algo más constituyen ciertamente eso que es un Cromosoma.
Los Genes son muy difíciles de estudiar porque están constituidos cada uno por unas pocas moléculas que vibran con inconcebible rapidez.
El mundo maravilloso de los Genes constituye una zona intermedia entre el mundo tridimensional y el mundo de la cuarta dimensión.
En los Genes se encuentran los átomos de la herencia. El YO PSICOLÓGICO de nuestros antepasados, viene a impregnar el huevo fecundado.
En esta era de Electro-técnica y ciencia atómica, de ninguna manera resulta exagerado afirmar que la huella electro-magnética dejada por un antepasado que exhaló su último aliento haya venido a imprimirse en los Genes y cromosomas del huevo fecundado por un descendiente.
El sendero de la vida está formado con las huellas de los cascos del caballo de la muerte.
Durante el curso de la existencia, diferentes tipos de energía fluyen por el organismo humano; cada tipo de energía tiene su propio sistema de acción, cada tipo de energía se manifiesta a su tiempo y a su hora.
A los dos meses de concepción tenemos la función digestiva y a los cuatro meses de concepción entra en acción la fuerza motriz tan íntimamente relacionada con los sistemas respiratorio y muscular.
Es maravilloso el espectáculo científico del nacer y morir de todas las cosas. Muchos sabios afirman qué existe intima analogía entre el nacimiento de la criatura humana y el nacimiento de los mundos en el espacio sideral.
A los nueve meses nace el niño, a los diez comienza el crecimiento con todos sus maravillosos metabolismos y el desarrolló simétrico y perfecto de los tejidos conjuntivos.
Cuando la Fontanela frontal de los recién nacidos se cierra a los dos o tres años de edad, es señal de que el sistema cerebro-espinal ha quedado terminado perfectamente.
Muchos científicos han dicho que la naturaleza tiene imaginación y que esta imaginación da forma viviente a todo lo que es, a todo lo que ha sido, a todo lo que será.
Multitud de gentes se ríen de la imaginación y algunos hasta la llaman la "LOCA DE LA CASA".
Al rededor de la palabra IMAGINACIÓN existe mucha confusión y son muchos los que confunden a la IMAGINACIÓN con la FANTASÍA.
Ciertos sabios dicen que existen dos imaginaciones. A la primera la llaman IMAGINACIÓN MECÁNICA y a la segunda IMAGINACIÓN INTENCIONAL: La primera está constituida por los deshechos de la mente y la segunda corresponde a lo más digno y decente que tenemos dentro.
A través de la observación y la experiencia hemos podido verificar que existe también un tipo de SUB-IMAGINACIÓN MECÁNICA MORBOSA INFRACONSCIENTE y SUBJETIVA.
Ese tipo de SUB-IMAGINACIÓN AUTOMÁTICA funciona por debajo de la ZONA INTELECTUAL.
Las imágenes eróticas, el cine morboso, los cuentos picantes con doble sentido, los chistes morbosos, etc., suelen poner a trabajar en forma inconsciente la SUB-IMAGINACIÓN MECÁNICA.
Análisis de fondo nos han llevado a la conclusión lógica de que los sueños eróticos y las poluciones nocturnas se deben a la SUB-IMAGINACIÓN MECÁNICA.
La CASTIDAD ABSOLUTA resulta imposible mientras exista la SUB-IMAGINACIÓN MECÁNICA.
Es a todas luces perfectamente claro que la IMAGINACIÓN CONSCIENTE es radicalmente distinta a eso que se llama IMAGINACIÓN MECÁNICA, SUBJETIVA, INFRACONSCIENTE. SUBCONSCIENTE.
Cualquier representación puede ser percibida en forma AUTO-ENALTECEDORA y dignificante, pero la SUB-IMAGINACIÓN de tipo mecánico, infraconsciente, subconsciente, inconsciente, puede traicionarnos funcionando automáticamente con matices e imágenes sensuales, pasionarias, sumergidas.
Si queremos la CASTIDAD ÍNTEGRA, uni-total, de fondo, necesitamos vigilar no solamente la IMAGINACIÓN CONSCIENTE, sino también la IMAGINACIÓN MECÁNICA y la SUB-IMAGINACIÓN INCONSCIENTE, AUTOMÁTICA, SUBCONSCIENTE, SUMERGIDA.
No debemos olvidar jamás la íntima relación existente entre SEXO e IMAGINACIÓN.
A través de la meditación de fondo debemos transformar todo tipo de imaginación mecánica y toda forma de SUB-IMAGINACIÓN e INFRA-IMAGINACIÓN AUTOMÁTICA, en IMAGINACIÓN CONSCIENTE, objetiva.
La IMAGINACIÓN OBJETIVA es en sí misma esencialmente creadora, sin ella el inventor no hubiera podido concebir el teléfono, el radio, el avión, etc.
La IMAGINACIÓN de la MUJER en estado de preñez es fundamental para el desarrollo del feto. Está demostrado que toda madre puede con su IMAGINACIÓN alterar la psiquis del feto.
Es urgente que la mujer en estado de preñez contemple bellos cuadros, sublimes paisajes, y escuche música clásica y palabras armoniosas, así puede operar sobre la psiquis de la criatura que lleva en sus entrañas armoniosamente.
La mujer en estado de preñez no debe beber alcohol, ni fumar, ni contemplar lo feo, lo desagradable porque todo esto es perjudicial para el desarrollo armonioso de la criatura.
Hay que saber disculpar todos los caprichos y errores de la mujer preñada.
Muchos hombres intolerantes y faltos de comprensión verdadera, se enojan e injurian a la mujer en estado de preñez. Las amarguras de ésta, las aflicciones causadas por el marido falto de caridad, repercuten sobre el feto en estado de gestación, no sólo física sino psíquicamente.
Teniendo en cuenta el poder de la imaginación creadora, es lógico afirmar que la mujer en estado de preñez, no debe contemplar lo feo, lo desagradable, lo inarmónico, lo asqueante, etc.
Ha llegado la hora en que los gobiernos deben preocuparse por resolver los grandes problemas relacionados con la maternidad.
Resulta incongruente que en una sociedad que se precia de cristiana y democrática, no se sepa respetar y venerar el sentido religioso de la maternidad. Es monstruoso ver a millares de mujeres en estado de preñez sin amparo alguno, abandonadas del marido y de la sociedad, mendigando un pedazo de pan o un empleo y ejerciendo muchas veces trabajos materiales rudos, para poder sobrevivir con la criatura que llevan entre su vientre.
Estos estados infrahumanos de la sociedad actual, esta crueldad y falta de responsabilidad de los gobernantes y de los pueblos nos están indicando con toda claridad que todavía la democracia no existe.
Los hospitales con sus salas de maternidad todavía no han resuelto el problema, porque a dichos hospitales sólo pueden llegar las mujeres cuando ya se acerca el parto.
Se necesitan con urgencia hogares colectivos, verdaderas ciudades jardín dotadas de salones y residencias para las mujeres en estado de embarazo pobres de solemnidad, clínicas y kinders para los hijos de éstas.
Estos hogares colectivos son alojamiento para las mujeres pobres de solemnidad en estado de embarazo, llenos de toda clase de comodidades, flores, música, armonía, belleza, etc., solucionarían totalmente el gran problema de la maternidad.
Debemos comprender que la sociedad humana es una gran familia y que no existe problema ajeno porque todo problema en una u otra forma afecta dentro de su respectivo círculo a todos los miembros de la sociedad. Es absurdo discriminar a las mujeres preñadas por el hecho de ser pobres de solemnidad. Es criminoso subestimarlas, despreciarlas o arrinconarlas en un asilo de indigentes.
En esta sociedad en que vivimos no puede haber hijos y entenados, porque todos somos humanos y tenemos los mismos derechos.
Necesitamos crear la verdadera democracia, si es que de verdad no queremos ser devorados por el Comunismo.