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La Transformación Social de la Humanidad: Capítulo 22.- Trabajo de los Menores de Edad

TRABAJO DE LOS MENORES DE EDAD

Actualmente existen muchos menores de edad que tienen que trabajar para ganarse la vida. Es necesario luchar también por los menores de edad. Es indispensable que ellos sean debidamente atendidos por la justicia social.

Está bien que la ciencia médica examine a los menores de edad y les extienda un certificado, es claro que se hace necesario examinar sus organismos para saber si son útiles para el trabajo, si pueden trabajar, si están en condiciones de trabajar.

Seria absurdo que las autoridades permitieran el trabajo de menores de edad en expendios de bebidas alcohólicas de Consumo Inmediato, cantinas, ventas de licor de toda especie, etc.

Existen ciertos trabajos que no perjudican a los menores de edad vendedores ambulantes, empleos de almacenes de mercancías, tiendas, oficinas, etc., el Gobierno debe siempre proteger a los menores que trabajan en esos establecimientos que no perjudican la moral de los menores.

Los Trabajos Subterráneos o submarinos, nos parecen demasiado peligrosos para los menores.

De ninguna manera conviene enviar a los menores a trabajar en lugares Insalubres y peligrosos, el organismo de cualquier menor fácilmente se enferma en lugares dañosos para la salud.

Es criminoso hacer trabajar a los menores en trabajos superiores a sus fuerzas, y en todos aquellos trabajos que en una u otra forma retardan el desarrollo del cuerpo y de la mente de los menores.

Por un deber de justicia social consideramos que los menores de edad no deben trabajar más de DOS horas diarias, divididas en dos periodos de una hora cada uno, uno en la mañana, otro en la tarde.

Es injusto hacer trabajar a los menores en horas extras y días feriados.

Los menores y los ancianos, necesitan consideración especial. Es urgente que los Patrones que violaren esta clase de disposiciones, sean debidamente castigados pagando un doscientos por ciento más del salario que corresponde al salarlo del trabajador.

Los menores deben gozar de un mes de vacaciones cada año, ellos necesitan buen descanso para vivir sanamente.

Los menores deben tener tiempo necesario suficiente, para poder asistir a la Escuela y centros de capacitación.

Los Inspectores de trabajos en toda ciudad, pueblo, aldea, etc., deben velar por la salud de los menores.

Es necesario que los Gobiernos exijan a los Patrones un libro de registro especial, donde se anote cuidadosamente la fecha de nacimiento, el tipo de trabajo, horario, salario, etc., para controlar esto de los menores, así todo marcha muy bien.

Los Juzgados de trabajo, inspecciones de trabajo, etc., deben ser exigentes con esta clase de registros, y multar a los Patrones que no cumplieren con dicha obligación.

La humanidad se ha vuelto demasiado perversa y egoísta, y por ello es urgente controlar debidamente a los Patrones.

Los menores de edad necesitan protección del estado, porque en ellos están puestas las esperanzas del porvenir.

Hemos conocido casos que horrorizan, a muchos menores de edad les ha tocado pagar el derecho a tener un miserable empleo, con su propia sangre.

Conocimos el caso de un menor que solicitó la entrada a cierto empleo de Gobierno; el Infeliz fue sometido a terribles vejaciones, y por último le extrajeron sangre en cantidad suficiente «DIZQUE» para el banco de sangre.

El pobre muchacho tenia necesidad del empleo para sostener a su madre, y a pesar de ser delgado y muy muchacho, tuvo que pagar con sangre, el derecho a trabajar.

Hoy en día no hay piedad para nadie, compasión para nadie, hasta el derecho a trabajar hay que pagarlo con sangre.

Multitud de menores pobres ambulan por las calles de las grandes capitales buscando trabajo, venga mañana les dicen, hoy no, mañana si, dentro de quince días. Te tendremos en cuenta para cuando haya una vacante, etc., etc., etc.

El tiempo va pasando y tal ves su madre tiene hambre, la familia sucumbe en la miseria, el Padre está enfermo y no puede trabajar, etc., la desesperación al fin llega, el menor se relaciona en las calles con individuos sin trabajo como él, desesperados: algunos menores ya desencaminados lanzan ideas delictuosas pero de relumbrón, el Ingenuo menor fascinado se entusiasma por tales ideas, y se MARCHA por el camino del delito, el robo, el asalto, el crimen, etc., etc., etc.

La Sociedad crea Monstruos del hampa, Gangster, asesinos, asaltantes, etc.

ES URGENTE COMPRENDER la necesidad de proteger a los menores, solo así, solo comprendiendo sus necesidades y protegiéndolos debidamente, es posible formar ciudadanos útiles para la sociedad y para la Patria.

Los menores que trabajan deben ser debidamente protegidos por el gobierno.

Los menores, serán los mayores del mañana, y por ello es urgente darles trabajo y protegerlos debidamente.