Capítulo 11
Jesús se pone su vestidura.
"Sucedió entonces que cuando vi el misterio de todas esas palabras en la vestidura que me enviaron y que me puse; brillé entonces con excelsitud y ascendí a las alturas".
El Jesús-Cristo Intimo, en cada uno de nos, se viste con su Sagrada Vestidura para ascender.
Resplandece el Cristo Intimo cuando asciende.
Jesús entra en el firmamento.
"Me presenté a la primera puerta del firmamento brillando excesivamente y no había modo de medir la luz que estaba en mí y las puertas del firmamento fueron sacudidas una contra otra y se abrieron todas al momento".
Normalmente, todo Iniciado tiene derecho a viajar hasta el Sol Central Sirio.
Ningún Iniciado puede pasar más allá de Sirio.
Sirio es la Capital de la Vía Láctea.
Alrededor de Sirio gira resplandeciente toda nuestra Galaxia.
El derecho a pasar más allá de Sirio hay que ganarlo.
Sólo Aquéllos que se han integrado con el Cristo Intimo han ganado el derecho.
Abrir las Puertas del Firmamento equivale a ganarse el derecho de pasar más allá de Sirio.
El Cristo Intimo brilla gloriosamente cuando, integrado con el Adepto, pasa por las Puertas del Firmamento.
Pasar por las Puertas del Firmamento equivale a pasar más allá de nuestra Galaxia.
Ante el Adepto cristificado se abren las puertas del infinito.
Los Poderes del firmamento se asombraron y se postraron y le rindieron culto.
"Y todos los Arcontes y autoridades y todos los ángeles de allí fueron poseídos de agitación debido a la gran luz que estaba en mí. Y ellos vieron la vestidura radiante de luz que yo vestía y vieron el misterio que contiene sus nombres y su temor fue excesivo. Y todos los lazos que los unían fueron desatados y cada uno dejó su orden y todos se pusieron de hinojos ante mí, me glorificaron y dijeron: "¿Cómo el Señor del Universo se ha pasado entre nosotros sin nosotros saberlo?" Y todos ellos juntos cantaron alabanzas a los interiores de los interiores pero a mí no me vieron aunque vieron la luz solamente. Y se atemorizaron y estaban grandemente agitados y cantaron alabanzas a los interiores de los interiores".
La Vestidura del Cristo resplandece gloriosamente.
El Misterio que contiene los Nombres Inefables resplandece en la Vestidura del Cristo Intimo.
El Señor del Universo es el Cristo Cósmico, el Cristo Intimo.
Las gentes devotas y sinceras, iniciadas, cantan a los Interiores de los Interiores más muy pocos ven al Cristo Intimo.
El Cristo Intimo desata lazos y rompe cadenas él es el Gran Libertador.
El Cristo Intimo es revolucionario en un ciento por ciento.