Capítulo 27
Sucedió entonces, cuando los Arcontes de los Aeones y aquéllos del Destino y aquellos de la esfera continuaron realizando esto - volviéndose a sí mismos, devorando su materia inútil y no permitiendo a las almas nacer en el mundo de la humanidad a fin de poder seguir siendo regidores y que sus poderes que están en sus poderes, o sea las almas, puedan pasar largo tiempo aquí afuera -, persistieron en hacer esto continuamente durante dos círculos.
Así, cuando yo quise ascender para ejercer el ministerio para el que fui llamado por orden del Primer Misterio, subí hasta en medio de los tiranos de los Arcontes de los Doce Aeones, con mi vestimenta de luz, brillando tan extraordinariamente que no había medida para la luz que me envolvía.
Que el Sol que os ilumina resplandezca en vosotros y que los Tiranos que os esclavizan renazcan como Hombres para que os enseñen e iluminen perpetuamente.
Así, Ellos devorarán su materia inútil, liberando a los que se debe liberar.
Los Señores de la Ley continuarán siendo Regidores en tanto sus humanas personas respeten la Ley.
Esto es fácil comprenderlo cuando sabemos que los Señores de la Ley también se reencarnan, y que, por lo tanto, poseen humano cuerpo.
El término "Tiranos" es meramente simbólico, o alegórico, o simplemente visto desde otro ángulo, esto es, desde el punto de vista del "Super- Hombre".
Los poderes de los Regidores están dentro de nuestra propia Alma.
Las Leyes de los Arcontes de los Aeones y del Destino, y de esta esfera de acción en que todos nos movemos, están dentro de nuestra propia Alma.
Siempre pasamos largo tiempo fuera, aquí mismo, en este Valle de Lágrimas, durante Dos Círculos o en Dos Círculos, el externo y el interno, el exotérico y el esotérico, el visible y el oculto.
Al fin, el Hombre Real se cristifica y asciende victorioso, para ejercer el Ministerio para el cual fue designado por orden del Padre de todas las Luces, el Anciano de los Días.
Debe subir el Adepto Cristificado hasta en medio de los Tiempos de los Regidores de los Doce Aeones, con su Vestimenta de Luz resplandeciendo extraordinariamente.
Adamas y los tiranos luchan contra la vestimenta de luz.
Y sucedió entonces, cuando los tiranos vieron la grandiosa luz que me rodeaba, que el Gran Adamas, el Tirano, y todos los tiranos de los doce aeones, ellos juntos, empezaron a luchar contra la luz de mi vestimenta deseando apoderarse de ella, a fin de permanecer más en su imperio. Esto hicieron ellos sin saber contra quién luchaban.
Adamás, el "Tirano", y todos los "Tiranos" de la Ley del Karma que gobiernan a los Doce Aeones, se oponen al paso del Hombre que marcha hacia la Liberación Final.
"Tiranos," es cuestión alegórica. Los Señores de la Ley son justos y cobran las deudas de todo Aquél que marcha hacia la Liberación.
Obviamente, debemos convertirnos en "Adeptus Exentus."
Jesús les quita un tercio de su poder y cambia su curso.
Cuando se aglomeraron y pelearon contra la luz, a partir de entonces y por mandato del Primer Misterio yo cambié sus senderos y los cursos de los aeones y los cursos de su Destino y de su esfera y los volví seis meses haca los triángulos a la izquierda y hacia las escuadras y hacia aquéllos en sus aspectos y hacia sus octógonos, tal como habían estado antes. Pero cambié su forma de girar o de enfrentarse a otro orden, y los hice enfrentarse otros seis meses hacia las obras de sus influencias en las escuadras a la derecha y en sus triángulos y en todos aquéllos en sus aspectos y en sus octógonos. Y los hice confundirse con gran confusión y engañarse con gran engaño - los arcontes de los aeones y todos los arcontes del Destino y aquellos de la esfera -, y los puse en gran agitación y desde entonces ya no son capaces de girar hacia su materia inútil y devorarla a fin de que sus regiones continúen permaneciendo y ellos (ellos mismos) puedan pasar un largo tiempo como arcontes.
Pero cuando les hube quitado un tercio de su poder, cambié sus esferas para que pasaran un tiempo mirando a la izquierda y otro tiempo mirando a la derecha. He cambiado todo su sendero y todo su curso y he hecho el sendero de su curso apresurarse para que puedan ser rápidamente purificados y rápidamente elevados. Y he abreviado los círculos y hecho su sendero más veloz, y éste será sumamente apresurado. Ellos fueron puestos en confusión en su sendero y desde entonces ya no han sido capaces de devorar la materia del desecho de la purificación de su luz.
No es injusto cobrar las deudas de los que deben.
Sin embargo, quien lucha por su Liberación, sufre mucho y siente a los Agentes de la Ley cual tiranos.
El Cristo Intimo puede, por mandato del Primer Misterio, cambiar dentro de nosotros mismos los senderos y los cursos del Destino y de la Esfera en que vivimos a fin de que logremos nuestra Cristificación.
Incuestionablemente, debemos aprender a caminar con los dos pies si es que queremos llegar a la Cristificación.
Hay que caminar intensamente con el Misterio Seis, hacia los Triángulos, a la izquierda.
No podría funcionar el Misterio Veinticuatro sin el Misterio Seis.
Dentro del Misterio Veinticuatro se esconde el Primer Misterio.
Las Escuadras de la Recta Conducta y los Octágonos del Octuple Sendero, en sus diversos aspectos, son el fundamento de la Gran Obra.
Las Escuadras a la derecha y los Triángulos y sus Octágonos en sus diversos aspectos, sirven de fundamento a la Gran Obra.
Seis meses hacia la derecha y seis meses hacia la izquierda, con sus Triángulos y Escuadras y Octágonos en sus diversos aspectos, encierran, en síntesis, el Trabajo de la Gran Obra.
Triángulos, significa las Tres Fuerzas Primarias de la Naturaleza y del Cosmos.
Escuadras, significa recta conducta.
Octágonos, ocho Iniciaciones, ocho calificaciones iniciáticas, etc.
Todo el Camino Secreto que conduce a la liberación final está marcado con triángulos, escuadras y octágonos.
Seis meses hacia la derecha, seis meses hacia la izquierda, mitad Luz, mitad Tinieblas.
Los Sabios deben trabajar por épocas en la Luz y por épocas en las Tinieblas del no Ser.
Esta clase de Trabajo Gnóstico, por épocas en la Luz y por épocas en las Tinieblas, confunde a muchos, y por ello son pocos los que logran la total Auto- Realización Intima del Ser.
Recordad el Arcano Seis, el Sexo, el Amor, el trabajo en la Forja de los Cíclopes.
Trabajar entre la super- obscuridad y el silencio augusto de los Sabios, es urgente en determinadas épocas.
Trabajar en la Luz, durante ciertos tiempos, es indispensable.
A toda subida le precede una bajada.
A toda exhaltación le precede una espantosa y terrible humillación.
Vivir entre los demonios y en los mundos infiernos, trabajando entre triángulos, escuadras y octágonos, es necesario.
Vivir en la luz, trabajando entre triángulos, octágonos y escuadras, es indispensable.
Luz y tinieblas se oponen y se complementan.
En este preciso instante, resulta muy oportuno transcribir el Fundamento Hermético de lo que estamos diciendo.
LA TABLA DE ESMERALDA por Hermes Trismegisto
Es verdad, sin mentira, cierto y muy verdadero: lo que está abajo es como lo que está arriba y lo que está arriba es como lo que está abajo. Por estas cosas se realizaron milagros de una sola cosa y como todas las cosas proceden de uno, por la mediación de uno, así todas las cosas han nacido de esta cosa única adaptación.
El sol es el padre y la luna la madre. El viento la ha llevado en su vientre. La tierra es su nodriza y sus receptáculo. El padre de todo, el thelema del mundo universal, está aquí. Su fuerza o potencia permanece íntegra si es convertida en tierra. Separarás la tierra del fuego, lo sutil de lo espeso, suavemente, con gran industria, asciende de la tierra y desciende del cielo, y recibe la fuerza de las cosas superiores y de las inferiores. Tendrás por este medio la gloria del mundo y toda la obscuridad huirá de ti.
Es la fuerza, fuerte con toda fuerza, pues vencerá toda cosa sutil y penetrará toda cosa sólida. Así ha sido creado el mundo. De allí saldrán admirables adaptaciones, cuyo método se da aquí
Sin la Magia Sexual y los Mundos Infiernos, no sería posible comprender los párrafos anteriores de Hermes Trismegisto.
Incuestionablemente, el Sendero de la Auto-Realización íntima del Ser resulta espantosamente difícil.
El Iniciado tiene que pasar mucho más allá del bien y del mal.
El Adepto tiene que pelear, no solamente contra las fuerzas del mal, sino también contra las fuerzas del bien.
La rocallosa Senda está rodeada de espantosos abismos imposibles de describir con palabras.
A veces, la senda se pierde entre las movedizas arenas, a veces es cortada por terribles precipicios, a veces hay que subir, o bajar hasta las tinieblas del no Ser.
A veces, una bella virtud que nada tiene de malo, puede convertirse en un obstáculo infranqueable que detiene la marcha del Caminante.
Bajar a las tinieblas del no Ser suele espantar a los caminantes del sendero solitario.
Los virtuosos vituperan a los caminantes que descienden a la morada de Plutón.
Sin embargo, no debemos jamás confundir una caída con una bajada.
En todo esto existen terribles confusiones.
Los Regidores del Destino y los Arcontes de los Aeones y de la esfera en que vivimos, cuyos poderes están dentro de nuestra propia alma, se confunden terriblemente.
Ellos se agitan dentro del Alma del caminante. La materia inútil no atrae a quienes marchan por la difícil senda, ellos ya no comen basura y sólo se alimentan de manjares sepulcrales ofrecidos por los Dioses.
Continuar como Regidores de cosas indeseables no es algo muy agradable.
El Cristo Intimo no cambia las esferas de los Regidores dentro de nosotros mismos, para que puedan equilibrar su trabajo entre la luz y las tinieblas.
Así es como podemos purificarnos rápidamente y elevarnos.
De este modo quedan abreviados los círculos y hecho el sendero más veloz.
La Aniquilación budhista es fundamental para la Cristificación radical.
Los Regidores de los Aeones y del Destino y de la Esfera de acción en que vivimos, los cuales están dentro de nosotros mismos, y que son además, partes autónomas y conscientes de nuestro propio Ser, quieren la eliminación radical del ego animal.
No sería posible establecer correctas relaciones en las diversas partes de nuestro propio Ser si antes no elimináramos los agregados psíquicos.
Todo este conjunto de agregados psíquicos, viva personificación de nuestros defectos psicológicos, constituyen el Ego, el Yo.
La Esencia, la Conciencia, se encuentra embotellada entre tales agregados psíquicos, procesándose, desgraciadamente, en virtud de su propio embotellamiento.
Ahora comprenderemos mejor por qué la Humanidad se encuentra en estado de hipnosis, inconsciente, dormida.
En tanto el ego animal continúe dentro de nosotros, no es posible la correcta relación consigo mismo.
Ya no tienen poder de devorar su materia.
Más aún, he reducido sus tiempos y sus períodos, de manera que el perfecto número de almas que recibirán los misterios y estarán en el Tesoro de la Luz, se complete rápidamente. Si yo no hubiese cambiado sus cursos y abreviado sus períodos, ellos no habrían permitido a ningún alma venir al mundo debido a la materia de su desecho - que hubiesen devorado- y ellos hubiesen destruido muchas almas. Por esta causa os digo antes: He abreviado los tiempos de mi elección, de otra manera ningún alma podría haber sido salvada. Y he abreviado los tiempos y los períodos debido al perfecto número de almas que recibirán los misterios, es decir, los elegidos; y si no hubiese yo abreviado sus períodos, ningún alma material habría sido salvada, sino que todas habrían perecido en el fuego que está en la carne de los regidores. Estas son pues las palabras sobre las que me has interrogado con precisión.
Y sucedió entonces, cuando Jesús terminó de decir estas palabras a sus discípulos, que todos ellos cayeron juntos, lo adoraron, y le dijeron: Bendito seas ante todos los hombres, pues nos has revelado estas grandes hazañas.
Los Regidores de los Aeones y del Destino y de la Esfera, los cuales se encuentran representados dentro de nuestra propia Alma por las diversas partes autónomas y auto- conscientes del Ser, no desean devorar la materia del desecho de la purificación de la Luz.
El Cristo Señor nuestro, reduce tiempos y períodos a fin de que podamos recibir prontamente los Misterios y estar en el Tesoro de la Luz.
Sin embargo, nosotros debemos trabajar intensamente sobre sí mismos si es que queremos ser ayudados por el Cristo Intimo.
A Dios rogando y con el mazo dando.
Sin muerte no hay resurrección.
Si no mueres, no serás resucitado.
La muerte, a la cual nos referimos en estos párrafos, nunca es la muerte del cuerpo físico y que para este tipo de muerte no es necesaria la Resurrección.
El Alma inmortal no necesita de la resurrección del cuerpo físico.
El terrible juicio del Señor es necesario antes de la Resurrección. Obviamente, debemos ser juzgados y muertos antes de la Resurrección interior profunda.
El tirano que cargamos adentro, el ego, debe ser muerto, si es que en verdad anhelamos la resurrección del Cristo en nosotros.
En tanto el Ser no haya resucitado, continuaremos inconscientes y perversos, sumidos en el dolor.
La Muerte del ego y la Resurrección del Ser en nosotros, debe ocurrir durante la vida.
El Ser y el ego son incompatibles.
El Ser y el ego son como el agua y el aceite, nunca se pueden mezclar.
Sólo las Almas resurrectas estarán en el Tesoro de la Luz.
La Iluminación Total es sólo para los Seres Resurrectos, para las Almas Perfectas.
El Cristo Intimo dentro de nosotros, cambia cursos y abrevia períodos a fin de que el Alma pueda cristalizar en nuestra humana personalidad.
Cada agregado psíquico dentro de nosotros es la viva personificación de algún defecto psicológico.
Incuestionablemente, cualquier defecto psicológico, al desintegrarse, es reemplazado por alguna virtud, poder, fuerza o ley que cristaliza en nuestra personalidad humana.
Así es como, poco a poco, vamos cristalizando Almas.
Obviamente, hasta el mismo cuerpo físico debe convertirse en Alma.
Alma es, pues, todo ese conjunto de fuerzas y poderes espirituales que deben cristalizar en nosotros.
Así es como viene el Alma a este mundo, así es como llegan las Almas a la Tierra.
Empero, si el agua no hierve a cien grados, no cristaliza lo que debe cristalizar y no se elimina lo que se debe eliminar.
Similarmente, afirmamos que debemos pasar por grandes crisis emocionales antes de lograr la desintegración de cualquier agregado psíquico.
No basta comprender cualquier defecto, es necesario eliminarlo.
Es urgente saber meditar para comprender cualquier agregado psíquico, o defecto psicológico, que es lo mismo.
Es indispensable saber obrar con todo el corazón y con toda el alma si es que queremos eliminar.
Cuando se suplica a Stella Maris, la Virgen del Mar, se es asistido.
La Divina Madre Kundalini, la Serpiente ígnea de nuestros mágicos poderes, puede y debe eliminar los agregados psíquicos.
Cada uno de nosotros tiene su Madre Cósmica particular, individual.
Stella Maris es reforzada por la Electricidad Sexual Trascendente, en la Forja de los Cíclopes.
Obviamente, es por ello preferible invocar a la Serpiente ígnea de nuestros mágicos poderes en la Fragua encendida de Vulcano, esto es, en plena Cópula metafísica.
Así, podemos y debemos precipitar la muerte de ese tirano que cargamos dentro.
De este modo pueden venir rápidamente las Almas a la Tierra.
La materia de desecho, los agregados psíquicos, viva representación de nuestros defectos psicológicos, impiden la llegada de las Almas al Mundo.
Es por ello necesario eliminar defectos y cristalizar Alma.
Es inefable el perfecto Número de Almas que recibirán los Misterios de la Luz.
Si el Cristo no abreviase los períodos dentro de nosotros mismos, ningún Alma habría sido salvada.
Esto significa que no se habría logrado cristalizar Alma en humanas personas.
El fuego del abominable órgano Kundartiguador, el fuego negativo que arde en los infiernos atómicos del animal intelectual equivocadamente llamado Hombre, habría anulado todo intento de Cristalización Anímica.
Así, habría sido imposible la llegada de Almas a la Tierra.
Cristalización Anímica, o llegada de Almas, en estos versículos, se toma como sinónimo o algo similar.